-Nada no imaginaba nada…
-¿Cómo que nada? ¿Entonces por que lo dijiste?-Veía como Niall estaba cada vez más nervioso y no le salían las palabras así que no insistí en preguntarle nada más.
-B-bueno pensaba… Pues q-que… Si te besé fue porqué siento algo por ti, algo diferente a las demás fans, y pensé que tu sentirías lo mismo que yo. Pero ya veo que no, que lo que yo siento hacia a ti no es recíproco…-Se acercó a una acera y se sentó.
-Niall siento decirte esto pero no, no siento lo mismo que tu. Es verdad que me atraes pero yo estoy con alguien y esa es la razón por la que he salido de allí corriendo, porque no quiero hacerle daño a la persona que quiero.-Sus ojos empezaron a humedecerse, y ver sus ojos azules así se me partía el corazón en mil pedazos.- De verdad que lo siento, no quiero que lo pases mal ni por mi ni por nadie. Solo te puedo decir ¿Amigos?
-Bueno, supongo que debí pensar antes de actuar, el que lo siento soy yo Lucía, espero que seas feliz con el chico que te quiere… ¿Amigos? ¡Claro que amigos! Con cualquier cosa que necesites me lo dices.
Yo sabía que lo día más que nada para quedar bien, pero dentro de él lo estaba pasando mal. No quería mentirle por eso le fui sincera, no es el hecho de que no me guste sino que yo ya estoy con alguien y ese alguien es Marcos, yo no podía engañarle ni nada por el estilo, era la persona que en estos momentos había robado mi corazón.
-Venga dame un abrazo Niall, no quiero que estés mal vale? Por favor y menos por esta situación. Estoy segura que tienes a miles de chicas que desearían estar contigo.- Mis palabras no sonaban convincentes para él, pero yo no le podía decir mucho más.
-¿Puedo decirte algo?
-Sí, claro que sí Niall, dime.
-Por favor no dejes que nadie ni nada te lastime, tu no te lo merecerías por nada del mundo.-Que tierno era en ese momento diciéndome eso.
Le levanté la cabeza y me arrodillé ante él. Le hice prometer que no iba a rayarse por eso y que no le diese más vueltas.
-Niall, la persona que te corresponda llegará tarde o temprano, seguro que la espera tiene su recompensa.
Le di un beso en la frente y le di un abrazo con todas mis fuerzas.
Volvimos allá dentro, Niall fue directo a buscar a Liam y al resto de los chicos pero sobretodo a Liam para contarle lo que había pasado fuera. Cuando nos separamos no me dijo nada así que yo me fui a buscar a Ruth que debía de estar por algún sitio bailando, pasándoselo bien o a saber que.
La encontré pero no quise molestarla estaba con Zayn hablando, se ve que habían tenido un buen feeling. Me di la vuelta y fui a buscar a los demás.
Me despedí de ellos y les empecé a dar las gracias por todo lo que habían hecho por mi, les estaba demasiado agradecida.
-Gracias a todos por hacer de esta noche un sueño inolvidable, sois muy grandes chicos. Espero volver a veros de nuevo.
-No hace falta que las des.- Contestó Louis.-Ha sido un placer conocerte y poder compartir contigo este día tan especial.
-Esperamos volver a verte hermosa-Intervino Harry.
-Si, de nuevo muchas gracias de verdad, si necesitáis algo ya sabéis.
-¿Sabemos? Dadnos vuestros números para estar en contacto con vosotras!-Dijo Zayn que terminaba de llegar con Ruth y se había unido a la conversación.
-Claro, os lo dejamos apuntados en este papel chicos.
Mientras Ruth apuntaba el suyo, me sonó el movil. ¿Quién podía ser? Me preguntaba mientras me alejaba de allí para poder escuchar a quien fuese.
-Si?
-Lucía, ¿Dónde estás? Soy Marcos, tengo una sorpresa preparada para ti.
-Ah, ¡hola Marcos! Pues es-estoy con Ruth dando una vuelta por ahí… De hecho nos íbamos ya a casa a descansar.
-No, espera. ¿Dónde estáis concretamente? Ahora paso a por vosotras y os llevo a casa y bueno tú… Tu te vienes un momento conmigo.
-Vale como quieras cariño. Te esperamos, no tardes anda.
-No, en un momento estoy ahí. Adiós preciosa.
-Adios Marcos.
Sí era Marcos el chico con el que llevaba saliendo siete meses. Él era alto, moreno con los ojos verdes, no era ni pijo ni hijo de papá. Había sido mi amigo toda la vida, él vivía bastante cerca de mi, desde pequeños habíamos ido juntos a la escuela…
Hasta que un día nos dimos cuenta de que ese amor de amigo ya no era lo mismo, sino que ese sentimiento era mucho más. Desde entonces que estamos juntos. Le quería demasiado, él era el que hacía todos mis días perfectos aunque no fuese un buen día para mi, el que con solo una sonrisa me hacía feliz, no necesitaba mucho de él, siempre estaba atento conmigo y se preocupaba por como estaba. Un cielo de persona.
Volví a donde estaba el resto. Le dije a Ruth que en unos minutos vendría Marcos a recogernos y llevarnos a mi casa, pero Zayn se entrometió en la conversación y dijo que él acompañaba a Ruth a mi casa que no me preocupase, así que les dí mis llaves a ella para que pudiese entrar y le dije que cuando llegase que me abriese.
En mi casa no había nadie, mi hermano estaba de fiesta con los amigos y se quedaba a dormir en casa de uno de ellos, por eso le vino perfecto no venir a recogernos. Mis padres estaban pasando el fin de semana en el pueblo así que la casa era solo nuestra.
Fui a despedirme de los chicos para decirles que me iba que pasaban a recogerme en nada. Les di dos besos a cada uno y un abrazo pero cuando llegué a Niall, le vi tan triste que no supe que decirle.
-Niall, me voy, pasan a buscarme…
-Ah ok.
Bueno le entendía, sabía lo que estaba pasando pero también me tenía que comprender a mí. Le di un abrazo y el puso sus brazos alrededor de mi cintura. Cuando me despegué solo estaba de él a pocos centímetros, comencé a sentir algo, mientras el subía sus manos hasta mi cara yo los puse rodeando su cuello. Así era inevitable resistirse a sus encantos. El se acercaba para besarme, y yo hice lo mismo acercarme, pero cuando nuestros labios estaban ya rozándose, me acordé de Marcos y me aparte.
Me tenía aún cogida y yo aún estaba abrazada a él. Me empezó a susurrar al oído, era tan hermoso…
-Que sepas, que voy a luchar por ti, sea quien sea ese chico del que estás enamorada.
Ni le contesté les dije un adiós a todos y me fui fuera a esperarle.
No tardó demasiado, en cinco minutos llegó. Subí al coche y me dijo que me pusiese una venda en los ojos que tenía que enseñarme una sorpresa. Parecía el chico de las sorpresas, siempre me estaba dando sorpresas, era muy detallista, algo que a veces me sentía agobiaba.
-¿Dónde me llevas cariño?
-Shhhh, ya verás
Tardamos como un cuarto de hora para llegar al sitio donde se suponía que estaba la sorpresa. ¿Qué podía haber hecho esta vez? ¿Qué sería? Preguntas y más preguntas se colaban en mi mente… Fuera lo que fuera seguro que debía de ser maravilloso.
-Hemos llegado Lucía… Pero no te quites aún la venda de los ojos.-Donde me llevaba señor…-Tranquila confía en mí.
-¿Como no voy a confiar en ti tonto?- Me cogió de brazos y mientras caminaba con migo abrazos yo pasaba mi mano por su pelo.
-Ya estamos.- Me dijo bajándome de sus brazos.- Puedes quitarte la venda.
Dios mío, ¿Dónde estábamos? Ese lugar era precioso, se veían perfectas las estrellas relucían con su brillo. Nos tumbamos en la manta que puso en el suelo y miramos hacia las estrellas. Entonces fue cuando se giró para quedarse mirándome.
-Lucía, ¿ves que bonita son las estrellas? Pues tú eres más bonita que todas ellas.
-Aww, ¿Marcos sabes que?
-¿Que?
-Te Quiero
Nos fundimos en un beso intenso, cogida a él giramos por la manta hasta yo quedar encima de él. Me aparté bruscamente de él, no sé porqué lo hice, bueno si, vino a mis pensamientos Niall y la cara que se le quedó cuando le dije que yo estaba con alguien, no sé como pude hacerle eso a un chico tan hermoso como él.
-Lo siento, no sé que me ha pasado.
-No pasa nada Lucía.
Nos quedamos tumbados un buen rato hasta que Marcos me dijo que si nos íbamos ya a casa. Llegamos, por las luces que se veían desde fuera todo indicaba que Ruth terminaba de casa y que estaba ya allí. Bajé del coche me despedí de Marcos diciéndole que había sido hermosa la sorpresa y le dí las gracias. Me besó la frente y me dijo hasta mañana cariño, se volvió a subir al coche y se marchó.
Disponiéndome a entrar en la casa, creí conveniente sentarme a reflexionar sobre todo lo que había ocurrido todo ese día. Niall era todo y único a lo que venía a mi mente. ¿Cómo pudo hacer eso? ¿Porqué de solo un día había sentido eso por mi? ¿Era de verdad o lo decía así por decir? Bueno si era de verdad lo que me decía no lo pongo en duda. Pero y… ¿Por qué me aparté de esa manera de Marcos? ¿Estaba enamorándome de Niall?
Decidí estar un rato más afuera pensando y buscando una respuesta para cada pregunta. Todo giraba alrededor de Niall. Llamé a la puerta, creí que ya había estado demasiado tiempo afuera pensando, ahora vendría el interrogatorio de Ruth, queriendo saber que había pasado con Niall.
-Lucía! Por fin llegas!-Dijo Ruth abriéndome la puerta y haciéndome el gesto para que entrase.
-Si, bueno es que Niall, em digo Marcos me ha llevado a ver las estrellas juntos y bueno he estado aquí fuera pensando un rato.
-Perdona habías dicho Niall?- Me preguntó con cara de decir “Cuéntame lo que yo no sé”.
-Si, pero solo que me había equivocado.
-Lucía te conozco y sé que te ha pasado algo, así que ya me lo estás contando.
-Mañana mejor Ruth, ahora necesito descansar, este día ha sido demasiado largo y han pasado demasiadas cosas.
Subí a la habitación, Ruth iba siguiéndome, me puse cambié y me acosté en la cama, ella en la otra que había al lado. Ella se durmió al instante, por lo que yo debía de tener cuidado en no despertarla. Me pasé un rato pensando hasta que me dormí, si pensando en Niall.
Me desperté por el rayo de sol que entró por la ventana, debió ser que al acostarnos tan rápido no cerré bien la persiana. Fui a mirar el móvil para ver la hora que era, debía de ser muy temprano aún, no llevábamos ni 4 horas durmiendo. Eran las ocho de la mañana, efectivamente cuatro horas solo que había dormido. Tenía un mensaje me apresuré a ver de quien era y si era de él.
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